¿Qué elijo hacer
y cuando lo haré?
Abrirse
a lo nuevo
Uno de los principios del milenario
arte del Feng-Shui es: si deseas que algo nuevo llegue a tu vida, antes deberás
hacerle espacio, despejarle el camino. Contundente.
Menos es más. Lo cual significa:
menos de lo que no deseas es más de lo que quieres. En otras palabras, soltar
aquello que ya no le "habla" al corazón, es la obra maestra de la
coherencia.
Por desgracia, en occidente no hay
una cultura del desprendimiento sino de la acumulación.
Incluso de la acumulación de lo que
ya no sirve.
Aplico el Feng-Shui a la escritura:
menos palabras, más significado.
Abrirte a lo nuevo supone
desvinculación con lo viejo. Puede parecer una pérdida pero es momentánea. Una
mano llena no puede recibir nada nuevo en su palma. Si deseas algo nuevo en tu
vida (sea una relación, un trabajo, independencia financiera, un nuevo estilo
de vida, o lo que fuera) antes deberás hacerle espacio.
La intención solo puede centrarse
en una cosa a la vez y mientras este fijada en la ausencia de lo deseado es
literalmente imposible manifestar su presencia, Esto puede aplicarse a todos
los aspectos de nuestra vida.
El Feng-Shui te enseña a crear un
estado, tanto interior como exterior, de apertura a la totalidad de las
posibilidades. Renovar es una tarea que debe hacerse regularmente. Consiste en
soltar todo aquel o que ya no le hable al corazón. Eso incluye tanto creencias,
hábitos, posesiones materiales, emociones, relaciones y amistades.
Menos de lo que no deseas significa
más tiempo y energía disponible para lo que deseas. Dos ejemplos. Uno: cuando
no se tiene que ir a trabajar para ganar dinero se obtiene tiempo y energía
para pensar en cómo hacerse rico. Dos: cuando se renuncia a una relación de pareja
insatisfactoria se obtiene libertad y energía para atraer una relación más
satisfactoria.
Toma un curso (o dos) de Feng Shui;
y si te lo aplicas, te garantizo cambios importantes en menos de tres semanas.
Prepárate
para el éxito
En la vida es preciso prepararse
para conseguir cualquier cosa.
El doctor Lair Ribeiro, autor de
diversos best sellers, suele afirmar que el éxito es la combinación de
preparación y oportunidad.
Analogía: prepararse es afilar el
hacha, la oportunidad es el árbol. A. Lincoln dijo que si dispusiera de ocho
horas para cortar un árbol, dedicaría seis a afilar el hacha. Yo mismo dedico
nada menos que media jomada a prepararme, durante media vida.
Pero veamos algunas pautas
enfocadas a "afilar el hacha":
Programa
de mejora continúa
Lo primero es integrar en tu vida
el aprendizaje para estar en la vanguardia de tu campo. Tu compromiso no solo
debe establecerse con los resultados, sino con tu mejora continua.
Desde luego, no podrás mantenerte
al día de absolutamente todo lo que ocurre en tu actividad o sector. Pero ello
no impide que no dejes de aprender ni un solo día de tu vida. ¿Cuánto tiempo de
tu jornada es para aprender?
La lectura
Si lees un mínimo de un libro por
semana, te aseguro que en cinco años serás un auténtico experto en tu materia
favorita. Hoy en día, la información que buscas está en alguna parte. Una hora
al día te bastara para pertenecer al diez por ciento de referencia en tu
sector.
La diferencia entre las personas
que leen y las que no leen es la misma que hay entre ir en bicicleta o en
avión. Si vas a decir que no tienes esa hora para ti, entonces tienes
problemas. Y de los gordos.
¡May-Day
May-Day!
Llevo más de 35 años leyendo libros
de superación personal de modo intensivo en lo que he invertido miles y miles de
pesos. Cada mes leo, como mínimo, un libro completo y uno resumido. A veces
más. Para mi dejar de aprender es empezar a morir. Mi mayor riqueza es el
conocimiento; y la peor pobreza, la ignorancia.
Hay una gran recompensa en la
lectura y es que expande en pensamiento. Cuando, a través de la lectura,
compartes el pensamiento con un autor, el tuyo alcanza el suyo. Los libros con
el grueso de mi presupuesto y también mi regalo favorito. Me encantaría recibir
por correo electrónico, tu recomendación. ¡El libro que más te haya influido!
Aunque establecer este hábito de
lectura intensiva pueda parecerte una meta inalcanzable, te aseguro que si
inviertes en tiempo de lectura, te adelantarás a tu tiempo. Pronto, te
acostumbrarás a mantener incluso varias lecturas a la vez. Lo siguiente que
ocurrirá es que ya no irás a ninguna parte sin llevar un libro contigo.
Los cursos
¿Tienes un presupuesto mensual? Si
no es así destina una cifra anual a ese fin. Si participas con regularidad en
buenos seminarios y cursos, aprenderás de primera mano de quienes están al día
y son expertos en su materia. Hoy tenemos acceso a personas preparadas y
expertas en cualquier campo, ¿Aprovechamos ese privilegio?
Recibe un curso, o dos, o tres, de
destreza comercial y financiera. Todos vendemos y todos manejamos dinero, es
inevitable; y sin embargo, nunca hemos sido entrenados en estas competencias.
Es la mejor inversión que he hecho en mi vida: aprender de cualquiera que tenga
algo que enseñarme.
Un ejemplo de dos personas muy
diferentes: la primera persona se gasta algunos cientos de pesos en unos
zapatos que, acabados de estrenar, han perdido todo su valor y que en un año
acabarán en la basura. La segunda persona invierte esos cientos de pesos en un
buen seminario (sobre comunicación, ventas, marketing personal o sobre
inversión y finanzas personales); con lo aprendido genera una cifra exponencial
que reinvierte, y con una pequeña parte de lo ganado se da el lujo de comprar
esos mismos zapatos, ¡O unos más caros!
Un simple seminario de un fin de
semana para el desarrollo personal puede marcar un antes y un después.
Las conferencias
Asiste a encuentros y conferencias.
Te facilitarán recursos, contactos con personas con intereses comunes. Los
buenos conferenciantes son generadores de entusiasmo. Puedes preguntarle al
orador acerca de sus propias experiencias, incluso pedirle que comparta contigo
sus fuentes y sus referencias. Seguro que te atenderá encantado, pues a todas
las personas le gusta hablar de aquello que conocen bien.
Los referentes
Aprende la excelencia de quienes la
demuestran. Busca tus referentes en tu campo de interés. Piensa en tres
personas que admires. No importa si son reales o ficticias y anota las tres
cualidades que más admiras en ellas. Desarrollar en ti las nuevas cualidades
son la misión de tu alma; y tu proyecto, el vehículo para lograrlo.
La práctica
Por último, si combinas todo lo
aprendido con la experiencia, transmutarás información en conocimiento. La
diferencia entre una persona informada y otra experimentada es abismal. Su
presencia transmite una clase de energía completamente diferente. Sabio no es
quien todo lo sabe, sino aquel que sabe muy bien lo poco que sabe. Práctica,
practica, practica...
La conclusión
Lee libros editados en tu país y si
puedes en el extranjero (así practicarás un segundo o tercer idioma). Escucha
CD motivacionales regularmente. Haz cursos de desarrollo personal y
profesional. Asiste a conferencias. Busca tus referentes. Y práctica. Invierte en el activo más poderoso que
posees: tu mente.
La que sigue es una de mis citas
favoritas: "Si piensas que la formación es cara, prueba con la
ignorancia", Benjamín Franklin. La diferencia entre quien es simplemente
bueno y quien es realmente grande no es tanta como puede parecer, pero es lo
que marca la diferencia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario