martes, 29 de octubre de 2013

Pasos en tu camino a la libertad (Parte tres)


Meditar
Meditar es precisamente volver a tu centro, crear espacio entre tú y tu mente, convertirte en el observador de tus pensamientos y de todo lo que pasa dentro de ti.
Meditar es no hacer, simplemente ser. Meditar es convertirte en el centro del universo, el ojo del ciclón, el testigo desapegado de lo que pasa.
Por miles de años los grandes maestros de la humanidad han propuesto la meditación como el método para crear un centro en ti.

Ser honesto
La verdad os hará libres.
He aquí una disciplina espiritual que cambiara tu vida: Decir la verdad y enfrentar las consecuencias. Ser radicalmente honesto creará un centro en ti, redefinirá tu vida, sanará tus relaciones y te llenará de poder personal. La honestidad es el remedio para años y años de juegos manipulativos y mentiras, la honestidad derrumbara los pilares de esta sociedad hipócrita que hemos solapado y abrirá la puerta a una sociedad sana, justa y equilibrada.
- Y cada vez que llevo a cabo estas acciones más crece en mí un sentimiento de valía propia ¿no es así?
- Así es. Un círculo virtuoso en el cual afirmas tú valía en el presente, yendo hacia dentro, enfrentando y confrontando lo que es, tu verdad, lo que realmente sientes y necesitas.
Te darás cuenta de que todas estas acciones tienen que ver sólo contigo, en el momento presente y te traen de regreso. No es que estés esperando llegar a alguna parte o queriendo llegar a ser algo que no eres ya.
- Explícame eso de "disciplina espiritual". ¿Qué tiene que ver lo espiritual con todo esto? ¿Te refieres a los mandamientos de la religión? ¿A no mentiras?...
- Los mandamientos son precisamente para personas sin centro que necesitan que alguien les diga cómo comportarse porque no confían en ellas mismas para distinguir lo que es correcto. Una persona con centro tiene su atención y su corazón para guiar sus acciones.
Esto tiene que ver con lo espiritual porque es una práctica que te acerca a tu centro: justo donde se encuentra la única posibilidad de hacer contacto con lo divino. Y ahora que lo mencionas, la religión, como está interpretada ahora, te aleja de tu centro. Eso es precisamente lo que buscan tus líderes religiosos.
- ¡Zaz! Ya vas con eso...

- Seguimos con eso, sí. Lo religioso no es espiritual, es justo lo contrario.

lunes, 28 de octubre de 2013

Pasos en tu camino a la libertad (Parte dos)


Aceptar lo que es
Un montón de energía y poder personal se ocupan en resistirse a lo que ya es. La mente cree que para cambiar lo que no le gusta necesita quejarse, lamentarse, enojarse e ir en contra. Tu insatisfacción con la vida es parte de esta resistencia. Una parte de ti cree que si aceptas las cosas como son quedarás atrapado en tus circunstancias. La realidad es que esta resistencia es no sólo inútil sino contraproducente. La energía utilizada en resistirse y en crear infelicidad, bien puede usarse para buscar soluciones y respuestas.
Aceptar no es resignarse, es más bien dejar de crear sufrimiento. Es cuando dejamos de resistirnos que abrimos la puerta a la creatividad.

Aprender a estar solo
Cuando tienes centro disfrutas de tu propia compañía, la pasas bien contigo mismo y no tienes esa imperiosa necesidad de estar con alguien. Si sabes estar sólo puedes ser auténtico y expresarte libremente en tus relaciones sin miedo al rechazo o al abandono.
Crear un centro en ti te permitirá poner límites en tus relaciones, lo que es un requisito indispensable para ser respetado y tomado en cuenta.

Atreverte a sentir
Detrás de los roles y juegos manipulativos está el miedo a sentir. Mantenemos nuestras relaciones superficiales por miedo a hacer contacto con el otro y a que descubran lo que realmente pensamos y sentimos. Lo que hay detrás de las adicciones es también el miedo a sentir.
Si te atreves a sentir y a mostrarte, vas más allá del ego y lo superficial hacia tu ser auténtico, hacia tu centro. En lo externo, mostrarse vulnerable puede confundirse con debilidad, sin embargo, fingir, compensar y aguantarse vienen del miedo y por lo tanto son en realidad muestras de debilidad.

Atreverse a sentir es ir hacia adentro, más allá de la máscara. Todas tus emociones son manifestaciones de quien tú eres y si les das espacio a que sucedan te permites conocerte de verdad.

viernes, 25 de octubre de 2013

Pasos en tu camino a la libertad (Parte Uno)


 Trabajar en cuidarte
Crear tiempo y espacios para ti. En tus actividades diarias pueden estar incluidas una disciplina psicofísica, diversión y momentos de recogimiento o relajación. Que quede claro con hechos que tienes el lugar más importante en tu lista de prioridades.
Nada te dará un sentimiento de propia valía como el cuidar de tu salud física y mental.

Enfocarte en ti
Dejar de estar pendiente de lo que hacen otros y volver la vista a ti, a lo que tú estás haciendo, pensando y diciendo. Dejar de esperar a que otros cambien y reconocer que a la única persona que puedes cambiar y eso si dedicas toda tu energía y tiempo a ello, eres tú mismo. Reconocer que tu responsabilidad para con los tuyos y tu entorno es estar bien, sano y consciente.
Observar tu costumbre de criticar, juzgar y opinar para darte cuenta de qué estás evitando ver en ti, de qué es lo que te molesta tanto de ti que lo proyectas en otros.

Apropiarte de tus cosas

Reconocer tus debilidades, problemas y errores para hacerlos tuyos y dejar de buscar culpables. Al hacerte responsable de lo que eres, lo que haces y de lo que te pasa, recuperas tu poder personal y la capacidad de encontrar soluciones. Al adueñarte de tus circunstancias te vuelves parte de la solución, de otra forma eres sólo una víctima de lo que pasa.

jueves, 24 de octubre de 2013

Creando un centro en ti (parte tres)


Relacionarte desde los roles del ego sin hacer contacto con el otro.
A lo largo de nuestros días adoptamos papeles y roles establecidos porque son lugares comunes, seguros y cómodos para todo el mundo. Sin embargo, si te pierdes en estos roles no te relacionas con el otro, son las máscaras las que interactúan.
Si tu mamá se ha relacionado contigo siempre desde su rol de madre, tú no le conoces. ¿Quién es esta mujer en realidad? ¿Cuáles son sus sueños? ¿Disfruta de su sexualidad? No lo sabes porque desde su rol, esos asuntos no se hablan.
Si observas unos de tus días te darás cuenta de que no haces contacto con nadie. En el elevador hablas del clima; en la tienda eres el cliente y el otro el tendero, todo el día se te va en el "como si".
Cada vez que te identificas con los roles del ego, es decir, que crees que eres el rol, te abandonas, te pierdes en el actuar.
Una lista de algunos roles que evidentemente dan al traste con tu poder personal:


- El bueno
- El santo
- El desvalido
- El hipocondriaco
- El tirano
- La complaciente
- El sabelotodo
- La fácil
- El rescatador
- El juez
- La mártir
- El viejito
- La víctima
- El macho
- La inútil
- La difícil
- El Don Juan
- El parlanchín


 Mentir.
Mentir es una más de las tantas estrategias manipulativas del ego, sin embargo, quiero profundizar en ella porque, en la mentira está basada la disfunción de nuestra sociedad. Mentir es lo que arruina nuestras relaciones y lo que sostiene la sociedad hipócrita en la que vivimos.
Sabemos ya que nuestros líderes políticos y religiosos nos mienten, sabemos que los medios mienten; nosotros mentimos a nuestros seres queridos y la verdad, que debería ser el único recurso, es siempre el último recurso.
La mentira está tan integrada en nuestras relaciones que ya no la reconocemos, tenemos un acuerdo implícito de creer nuestras mentiras para no confrontar ni causar problemas. Es por eso que nuestras relaciones son poco profundas e insatisfactorias. La mentira es la base y causa de las traiciones; la infidelidad, las desilusiones.

Mentir es abandonarte y es obviamente una traición a ti mismo. Cada vez que mientes pierdes tu centro y la oportunidad de recuperar tu poder personal.

martes, 22 de octubre de 2013

Creando un centro en ti (parte dos)


- Suena terrible. ¿Y qué podemos hacer al respecto?
- Esto que estamos haciendo. Despertar, dejar de seguir ciegamente, recuperar nuestro poder personal y nuestro centro. Necesitamos ir más allá de lo establecido, dejar de perseguir la zanahoria inalcanzable de lo externo y volver la vista a nosotros para crear un centro. Sólo la consciencia puede lograr un cambio. ¿Seguimos?
- Seguimos.
- Vamos primero a analizar las actitudes que van hacia afuera. Cada vez que caes en una de ellas, pierdes poder personal y te alejas de tu centro:
·        Hacer de la búsqueda y del cuidado de lo externo tu prioridad más importante.
Buscamos afuera el remedio para nuestra soledad o tristeza, para nuestra falta de amor propio o sentimientos de minusvalía. Sin embargo, todo lo externo es transitorio, ya sea un auto nuevo o una nueva relación, todo tiende a cambiar y eventualmente termina. La luna de miel de hoy es el corazón roto de mañana.
·        Usar cualquier juego manipulativo en lugar de ser sincero y auténtico.
Manipular a otros abusando de lo que sabes, de lo que tienes o de cualquier tipo de poder que ejerzas sobre ellos es traicionarte. El ego se infla creyéndose más inteligente o más hábil que los demás aprovechándose de sus necesidades o miedos. Así es como aprendiste a obtener lo que quieres fingiendo y engañando.
Una lista de algunos juegos manipulativos para que puedas identificarlos cuando caigas en ellos:
- La seducción
- Las excusas
- Culpar a otros
- La indiferencia
- Rebelarse
- Controlar
- Esconderse
- Encogerse
- Explicarlo todo
- La desidia
- La arrogancia
- Compararse
- Someterse
- La condescendencia
- Exagerar

- Hacerse la victima

lunes, 21 de octubre de 2013

Creando un centro en ti (parte uno)


- Dijimos al inicio que puedes enfocar tu atención en dos direcciones: hacia adentro y hacia fuera. Dijimos también que vivir desde el ego es fingir, actuar y manipular. Bien, pues enfocarte en lo externo, manipulando o no siendo auténtico, te aleja de tu centro. Toda tu energía va hacia fuera porque crees que lo que te validará está allá, lejos de ti, en el futuro. Cualquier actitud que te aleja de tu centro es un abandono de ti mismo.
- Pero, en esta sociedad estamos todos enfocados en lo externo...
- Así es. La nuestra es una sociedad que promueve el abandono de nosotros mismos.
Nuestros líderes políticos, religiosos y las corporaciones quieren gente distraída, atontada, fácilmente manipulable, pusilánime, sin poder personal, sin centro.
Pon atención en los anuncios, notarás que todo lo que venden es para el EGO: Algo que te hará verte, escucharte, sentirte o parecer mejor. Algo externo que puedes relacionar con lo que crees que eres para inflar esa imagen que presentas a otros. Y una vez que hayas hecho un análisis de la publicidad... tira por favor la maldita televisión por la ventana. Esa es el arma de manipulación más poderosa jamás inventada, es justo el medio por donde fuiste hipnotizado, hechizado,  aleja a tus hijos de ella y evítales una vida de minusvalía e insatisfacción.
En la religión es lo mismo. Allá y entonces hay un premio para ti si te comportas como te dicen. Lo divino está allá en el cielo, sentando en una nube y nada tiene que ver contigo, es otra persona.
- Y ¿la reencarnación?
- ¡Ah! La reencarnación... ¡Resulta ahora que la vida es una especie de programa de superación personal y el premio es eso que llaman iluminación! Mismo mensaje: estás jodido, pero si trabajas duro y haces lo que te dicen, un día llegarás al nirvana. Allá y entonces...
- Me parece increíble que los líderes políticos y religiosos y las corporaciones insistan en su dominio y su manipulación.
o   ¿Qué no se dan cuenta de que esto ya no da para más?
o   ¿Cómo es posible que pongan primero sus intereses que el bienestar de todos?
o   ¿Cuánto poder y dinero son suficientes?
Parece una conspiración. Unos cuantos manteniendo a toda la humanidad distraída, idiotizada, persiguiendo lo que no necesita, insatisfecha, infeliz e hipnotizada.

- Las organizaciones y las corporaciones son reflejo de nuestro estado de consciencia. Son una versión exagerada de nuestro propio ego. Si le hiciéramos un examen de personalidad a la Coca Cola resultaría que es un psicópata que no tiene la menor consideración por sus semejantes, que lo único que busca es la gratificación exagerada de deseos fuera de control, que se caga en su propia casa y destruye a su familia y su propio entorno. Y el mismo examen para un partido político nos daría como resultado un mitómano, narcisista, egocéntrico con delirios de persecución y un sociópata sin la menor consideración para quienes le rodean.

viernes, 18 de octubre de 2013

Vives insatisfecho


El vacío interior no será llenado con nada externo. Y este es el malentendido que ha causado tanta miseria en el ser humano. Esta es la razón de la acumulación desmedida, el consumo exagerado, la distribución injusta de los recursos y la terrible insatisfacción en la que vive sumido el hombre. Esta es la razón de las guerras, las conquistas, la pobreza y la destrucción de la naturaleza. Una humanidad entera tratando de llenar desesperada el vacío que siente.
- Espera un momento. Veo la disfunción en todas estas actitudes y costumbres, sin embargo, todo esto es considerado normal, ¿no es así? Todo el mundo se comporta de esta manera...
- Pegarle a las mujeres, tener esclavos, discriminar a la gente de color, todo eso era considerado normal hace unos cientos de años de acuerdo al nivel de consciencia que teníamos, ahora no lo es. Todas las actitudes que he mencionado, son consecuencia de vivir identificados con la mente y el ego. Sin embargo, cada vez se hace más evidente para más personas que lo "normal" es una locura colectiva que urge detener o no sobreviviremos.
Por primera vez en la historia de la evolución una especie tiene que participar activamente en el cambio. "La evolución del hombre es la evolución de su consciencia y ésta no puede evolucionar inconscientemente. La evolución del hombre es la evolución de su voluntad y ésta no puede evolucionar involuntariamente. La evolución del hombre es la evolución de su capacidad de hacer y ésta no puede ser resultado de lo que sucede".
Ahora entiendo lo que decías sobre la importancia de trabajar en nosotros mismos y del cambio interno que se manifestará en todo lo que nos rodea. Al cambiar nosotros, cambiamos al mundo.
- Así es. El cambio que necesitamos no es político o social, es individual. Al sanar tú sanas al mundo.
Pues acepto el reto y la responsabilidad. ¿Con qué seguimos?

- Seguimos con cómo crear un centro en ti.

jueves, 17 de octubre de 2013

Los demás maneja tu vida?


Tus reglas y códigos morales son externos
Los sigues solamente por medio del castigo o por la promesa de un premio. No hay en ti un sentimiento de integridad para guiar tus acciones ni la confianza de que bastan tu inteligencia y tu corazón para decidir que es correcto y que no es digno de ti.

No puedes honrar tus compromisos.
Sin una identidad propia no hay coherencia en lo que piensas, dices y haces. No puedes cumplir tus promesas porque no hay nadie ahí que respalde lo que dices, tus palabras son cheques sin fondos. En la noche decides algo, en la mañana ya cambiaste de opinión y para la tarde ya no recuerdas lo que habías decidido. No es que mientas, lo que pasa es que tus verdades son de corto plazo.
No tienes disciplina ni la posibilidad de llevar a cabo tus proyectos; no hay nadie ahí dentro que le dé seguimiento a lo que te propusiste. Y por último…

miércoles, 16 de octubre de 2013

Primero los demás


Te abandonas, te traicionas, no te respetas.

Si tu centro está en otra persona, tú estás perdido. Sufres por el miedo al abandono y el miedo al rechazo es lo que domina tus relaciones. Vives para otros y a través de ellos, pendiente de lo que hacen y dicen, al tanto del "qué dirán" tan importante para ti. Al poner tu centro en otro le haces a él responsable de tu felicidad y vives aterrado, pendiente de lo que hace, queriéndolo controlar, sin darle libertad.

No eres auténtico.
Le copias a todo el mundo y sigues modas que ni te quedan. Tratas desesperado de encajar, de gustar, de ser incluido. Hablas con clichés, haces todo lo que te dicen y eres como se supone que tienes que ser.

Tu atención está siempre afuera, en allá y entonces.
Crees que hay algo en el futuro, un conjunto de eventos, situaciones y cosas que por fin te harán sentir bien acerca de ti mismo y enfocas toda tu energía en conseguir eso que por fin "confirmará" tu valía.
El presente se vuelve sólo el medio para llegar allá. Tu vista está enfocada en lo externo porque al mirar hacia adentro lo que encuentras es un vacío terrible y, por lo tanto, tu motivación es externa. No hay nada dentro de ti que te mueva a hacer las cosas que no sea la búsqueda de aprobación y el reconocimiento de otros.

lunes, 14 de octubre de 2013

Eres un Mendigo



Si es el otro el que te valida, el que le da sentido a tu vida o tu razón para existir; si el otro es tu mundo y felicidad, tu sol y el aire que respiras, entonces... ¿quién eres tú? 
Eres un apéndice, una extensión, un accesorio, un títere, un monigote, un mendigo de amor. 
Dependes tanto del otro que haces circo, maroma y teatro para tenerle feliz y no te abandone. 
Si le necesitas, entonces no puedes ser tú mismo: te andas por las ramas, eres diplomático, caminas de puntitas y cuidas cada una de las cosas que haces, dices, piensas y sientes para que el otro no vaya a molestarse. 
Haces todo por complacerle a costa de cualquier cosa, de tu dignidad, de tu integridad y a costa de ti mismo.
Eso por eso que...


lunes, 7 de octubre de 2013

Vivir sin centro (parte 2)

Todo es más importante que tú mismo.


Tu trabajo, tus pendientes, tu pareja, tus hijos, todo está antes que tú en tu lista de prioridades y es por eso que dices que no tienes ni tiempo ni energía para ti. Y, aunque se te ha dicho que es loable poner a todos antes que a ti, la realidad es que no puedes darle nada a nadie si no cuidas de ti primero; la realidad es que lo que buscas en los demás al dar, es su atención, su amor o su aprobación. Quieres ser un "gran padre" que se sacrifica por sus hijos, una "esposa abnegada" que dedica su vida a su marido, un "mártir" que da la vida por su causa... Puras excusas para no hacerte responsable de tu vida. ¿Ese el ejemplo que quieres darles a tus hijos?, ¿de verdad quieres que ellos se sacrifiquen y responsabilicen a otros de su insatisfacción? Los mártires y santurrones no le dan nada bueno al mundo, lo llenan de tristeza, culpa y resentimiento.

Para que puedas darle algo valioso a otros y al mundo, tienes que cuidar primero de ti, de tu salud y bienestar. Sólo estando bien tú mismo tienes algo que compartir, antes lo único que compartes son miserias. Nada hay más antiecológico que un infeliz, contaminando todo lo que le rodea con tristeza y negatividad.

martes, 1 de octubre de 2013

Vivir sin centro (parte 1)


 - Eso lo he sentido muchas veces. Dependo de todo para sentirme bien. De mi pareja, de mi trabajo, del dinero, de la opinión de otros...
- Exacto. Lo externo es lo que le da sentido a tu vida. Y date cuenta de esto: lo externo es muy frágil, cambia todo el tiempo y tarde o temprano se acaba. De ahí vienen la angustia, la codependencia y el abandono de ti mismo.
- Como no hay nada dentro de mí que me haga sentir valioso y digno de amor, busco afuera algo o alguien que me haga sentir bien acerca de mí mismo.
- Vivir sin centro es abandonarte todo el tiempo, es la obstinada costumbre de buscar afuera algo que llene el vacío interior que sientes. Vivir sin centro tiene serias consecuencias.
- Y las analizaremos a continuación...

- Lo haremos. Para que puedas observarte y cada vez que te descubras en cualquiera de estas actitudes estés consciente de ello.

Continuará...